Buenos días seguidores hoy mi blog estará dedicado a Cortes de la Frontera. Este pequeño pueblo está situado en el valle del Guadiaro y es el pueblo más grande de su comarca, compartiendo a medias los Parques Naturales Sierra de Grazalema (24% del término) y Los Alcornorcales (69,42% del término).
LA historia de este municipio comienza con la llegada de los fenicios, musulmanes, judíos y por último cristianos. Destacan los resto de La Casa de Piedra, una ermita de origen paleocristiano o mozárabe labrada en arenisca.
Tras dejar el coche en aquella fría y gélida noche de Diciembre, el pueblo se me antojaba solitario, silencioso, a veces roto por las risas de algún niño que se divertía en la plaza del ayuntamiento a modo de "pilla" "pilla" para entrar en calor. Y fue aquí en la plaza del ayuntamiento donde hice mi primera parada para ver y contemplar una de las casas consistoriales más bonitas y atractivas que he visto, no es para menos porque su fachada de estilo neoclásico y fechada en 1784, como vemos en su friso, fue mandada a construir por el rey Carlos III y consta de dos pisos de arenisca con cinco arcos de medio punto.
Un poco más arriba me encontré con la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, levantada a finales del siglo XVIII, concretamente en 1.853, posee tres naves separadas por arcos de medio punto sobre pilares de núcleo cuadrado. La capilla mayor y brazos del crucero tienen bóvedas de medio cañón. A los pies tiene un coro-tribuna con balaustrada de madera y sotacoro cubierto con bóveda de medio cañón rebajado. En el exterior deben señalarse las portadas de piedra del hastial y de la nave de la Epístola. La torre, adosada a la cabecera y realizada en ladrillo, piedra y mampostería, es de tipo prismático.
Al cruzar la calle principal, entras en unas callejuelas de empinadas rampas donde sus casas blancas exentas de tejados coloniales te dan la bienvenida en multitud de colores, este pueblo es famoso por su corcho, valle de los Arcornocales, y esto se ve en las numerosas esquinas adornadas con azulejos donde nos cuentan la vida del pueblo.
Mi visita a esta localidad fue rápida y fugaz, aún así me quedaron algunas cosas que visitar como; La Casa de Piedra, del siglo VI al VII -Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, siglo XVIII -La plaza de toros, siglo XIX -Capilla y pórtico de Valdenebros, siglo XVIII -Torre de Paso, siglo XIII -Cortes El Viejo, antiguo asentamiento romano y árabe.
Os recomiendo pasar y visitar la villa, no para quedarse y sólo visitar este pueblo, aunque una buena idea sería quedarse y visitar todo su entorno, lleno cuevas, acantilados y maravillas de nuestra tierra.
Para más información: http://www.cortesdelafrontera.es/es/index.html
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